jueves, 2 de febrero de 2012

London Calling


Llegó por fin la llamada de Londres y di con mis cansados huesos en la capital de las capitales en Europa. La gran city que todo lo inventó y que tantas calles tiene llenas de historia a sus espaldas. Pocas ciudades me han causado tal impresión y es que desde que empecé a flipar con el punk y a imaginarme a los Clash o a los Pistols caminar por el asfalto de Londres, siempre he querido aterrizar aquí.
Muchas cosas que ver en pocos días. El milagro de las Low Cost y las visitas exprés a cada rincón que se pueda multiplica las posibilidades, pero obliga a concentrar las experiencias allende las fronteras que conocemos. Aunque siempre hay un hueco para el guirismo típico (Big Ben, Fuckingham o Hyde park), me quedo con con el paseo por debajo de la de la Westway, que tantó inspiró a a Simonon y Jones para expresar su frustración y aburrimiento del Londres de los 70, la comida en Portobello junto al mercadillo de casi todo, o la noche de pintas que pasamos en The Intrepid Fox, el garito rockero por excelencia de Londres, junto a integrantes de los UK Subs, de los que ya he hablado en alguna antigua entrada de este blog sin demasiada buena prensa.
Educados hasta la saciedad, los londinenses tienen un inglés soprendentemente inteligible para mí, y un aprecio al frío que me dejó perplejo. Chicas sin medias y mangas cortas en pleno enero. Y si Oxford Street concentra todas las imágenes del capitalismo consumista que tanto practica Londres, también hay sitio para las protestas contra de los recorte sociales que Cameron está llevando a cabo. Contrastes en una ciudad donde la diversidad es un hecho y no una proyecto y donde la sensación de vivir en un constante movimiento es continua.
Tendremos que volver a pisar estas calles, Londres arde y queremos verlo de nuevo.

Y no hubiera disfrutado ni una millónesima parte de esta ciudad sin una granota que con su mano me guió por las calles de Londres que ya conocía y a la que dedicaré estas líneas de la canción "Steets of London" que estuvo rondando en mi cabeza durante aquellos tres días que descubrí esos rincones que tanto me gustaron...



Have you seen the old man
In the closed-down market
Kicking up the paper,
with his worn out shoes?
In his eyes you see no pride
And held loosely at his side
Yesterday's paper telling yesterday's news

So how can you tell me you're lonely,
And say for you that the sun don't shine?
Let me take you by the hand and lead you through the streets of London
I'll show you something to make you change your mind

Have you seen the old girl
Who walks the streets of London
Dirt in her hair and her clothes in rags?
She's no time for talking,
She just keeps right on walking
Carrying her home in two carrier bags


In the all night cafe
At a quarter past eleven,
Same old man is sitting there on his own
Looking at the world
Over the rim of his tea-cup,
Each tea last an hour
Then he wanders home alone

And have you seen the old man
Outside the seaman's mission
Memory fading with
The medal ribbons that he wears
In our winter city,
The rain cries a little pity
For one more forgotten hero
And a world that doesn't care

Vientos de cambio

No hace ni un mes que Don Mariano "Hilillos de Plastilina" Rajoy ha empezado a aparecer en escena para que nos empecemos a dar cuenta que algo gordo se avecina en cuanto a lo que está por venir en este país. No es nada nuevo que la derecha va a dar otra vuelta de tuerca a la situación y va a contribuir aún más a nuestra malestar con sus políticas, sobre todo en lo que a lo económico se refiere. Pero aún así, jode. El PSOE hizo gran parte del trabajo sucio a los empresarios y aquí están los neofranquistas para rematar la faena. Si en lo económico seguimos jodidos y no seguirán jodiendo, en lo social, no dejan de aparecer cada día nuevas propuestas de los "demócratas de toda la vida" que no hacen más que confirmar que volvemos virar a la derecha. Hoy ha aparecido el nuevo Ministro de Cultura y Deportes y no sé cuantas cosas más y ha presentado el "cambio de tercio" que todos los taurinos han estado esperando, que no es otra cosa que intentar proteger la "Fiesta" de los toros. Proteger un cadáver. Y proponerlo como patrimonio de la humanidad. Me borro como humano si algo así sale adelante.
¿Cuanto queda para la vuelta de noche de fiesta los sábados? ¿Cuando volverá a ser un panfleto como lo llegó a ser el Telediario en los tiempos de Aznar? Será declarado IN-CONS-TI-TU-CIO-NAL no tener a la flamenca y el torero encima de la tele. Han vuelto, y con fuerza. Viva er pasodoble y viva lo españó.
Y aquí estaremos, aguantando el vendaval.